En una semana en que ya se respira clima de Superclásico, Felipe Melo jugó a lo Boca enfrentando a River en el Maracaná, en un partido que terminó con una contundente victoria 5-1 para los suyos que los dejó muy bien posicionados para sellar la clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores.
El mediocampista brasileño, quien pudo irse expulsado por una dura entrada sobre Nacho Fernández y una mano que cortó un claro ataque del Millonario, es un confeso hincha del Xeneize y no quiso dejar pasar semejante triunfo ante el clásico rival para cargarlo, contándole con su mano cada uno de los goles.
Más allá de la burla, Felipe Melo también se dio el tiempo de ser más analítico y se sinceró al señalar que Fluminense no mereció ganar el partido con semejante diferencia. "De repente, los que no lo han visto, pueden hacerse una idea equivocada. Fue un partido de Copa Libertadores. Jugamos contra uno de los mejores equipos del continente", empezó diciendo en zona mixta.
"El 5-1 nos pone muy contentos, pero tenemos los pies sobre la tierra. El resultado fue mentiroso. Sabemos que no jugamos para ganar 5-1. Sí creo que jugamos para ganar el partido, tuvimos méritos", agregó el exjugador de Palmeiras, Inter y Juventus; quien tiene ya 39 años.
Y concluyó: "Con el 1-1 ellos tuvieron más posesión, intentaron jugar. Pero la afición marca una gran diferencia cuando viene a este estadio, porque transmite energía y con ese impulso salimos a ganar. Hicimos el 2-1, tuvimos la oportunidad de hacer más. Defendimos bien. Dicen que el Fluminense juega muy bien con la pelota, pero yo también digo que tenemos gran humildad para correr detrás de la pelota".
