En la tarde-noche del sábado, River y Vélez se enfrentaron en el Monumental, bajo el marco de laCopa Juan Gilberto Funes. Para ambos fue el último encuentro amistoso de la pretemporada, previo a lo que será el inicio de la Copa LPF, que comenzará el próximo jueves 10de febrero.
Después de mucho tiempo, Lucas Pratto regresó a la cancha del Millonario y se llevó una enorme ovación por parte de los hinchas, quienes corearon su nombre e hicieron temblar a todo Núñez. Además, la dirigencia le entregó una plaqueta por su labor en la institución riverplatense y, a pesar de las diferencias, se abrazó con Marcelo Gallardo.
En cuanto a lo futbolístico, desde el minuto cero, River presionó a los dirigidos por Mauricio Pellegrino y trataron de dominar constantemente. De hecho, Enzo Fernández fue una gran opción de pase, como así también uno de los principales conductores del juego del último campeón de la Liga Profesional. Sin embargo, en más de una ocasión estuvo en jaque, al menos durante la primera etapa.
Al igual que en los 45 minutos iniciales, la actuación de Lucas Hoyos evitó que los de Gallardo se impusieran en el marcador. El arquero de Vélez fue de los rendimientos más altos de la jornada y tuvo una serie de atajadas increíbles.
A diferencia de lo que fue el encuentro ante Platense, a los de Núñez no se les hizo tan fácil poder generar el juego, ya que Vélez se transformó en un rival que incomodó al conjunto dirigido por Marcelo Gallardo. Pero el Muñeco encontró una solución para generarle muchísimo peligro al Fortín: mandó a la cancha a Esequiel Barco, Nicolás De la Cruz y Juanfer Quintero.
Entre el colombiano, Barco y Julián Álvarez no faltaron las asociaciones de juego, y los hinchas se volvieron locos. Incluso, el ex Independiente deleitó a los presentes con un hermoso caño, que hizo levantarse de la butaca a más de uno. Fútbol champagne en el Monumental.
Tal como habían acordado en la previa del encuentro, si el mismo terminaba igualado, laCopa Juan GilbertoFunesquedaría en manos de la visita, por lo que Vélez comenzó el año con el pie derecho, a pesar del empate en el Monumental.
