Debutó en la Primera de River después de haberlo hecho con la Selección Argentina, donde fue capitán, subcampeón del mundo y subcampeón dos veces de América. Pasó al Corinthians y fue campeón del Brasileirão. Saltó a Europa y cayó en el West Ham. Duró apenas seis meses: Liverpool puso 35 millones de dólares por él. Explotó como futbolista y hasta llegó a la final de la Champions League. Barcelona puso 24 millones y Pep Guardiola le dio la titularidad en el mejor equipo de la historia. Ganó todo. 

Ahora, después de un año por la Superliga China vistiendo los colores del Hebei Fortune, Javier Mascherano fue presentado como el flamante refuerzo de Estudiantes de La Plata: regresó al fútbol argentino después de quince años. Una eternidad.

Hace unos días se habló de los rumores de la posible llegada de Andrés Iniesta al Pincha y que el mediocampista podría convencerlo de ello. Por eso, ahora le preguntaron si podría hacerlo mismo con Lionel Messi.

Inmediatamente, en una entrevista que dio a Infobae, respondió si le preocupa que le pidan ese llamado: "No. No tiene nada que ver la realidad que tiene él con la mía. Ni hablar de la magnitud. Él es el mejor jugador del mundo, aunque en el fútbol puede pasar cualquier cosa".

"Todo dependerá de las ganas que él tenga de jugar en el fútbol argentino. También hay que tener en cuenta las circunstancias del plano familiar. Si quieren volver a vivir a la Argentina o no. Son cosas personales y privadas que uno trata de no meterse", agregó.

Por último, sentenció: "Si algún día Leo decide venir al fútbol argentino será un salto de calidad gigante para el deporte y para el país, por todo lo que él representa".

¿Se imaginan en Messi en la Superliga Argentina? Hoy parece más lejos que nada.