El primer duelo de la mañana. Si juega el Arsenal hay promesa de buen fútbol. O, por lo menos, de ver un partido entretenido. Hoy fue ante el Crystal Palace en condición de visitante. 

Los Gunners arrancaron mejor porque, a los 11 minutos de la primera mitad, David Luiz comenzó un ataque frontal, profundizó y, después de unos toques, Pierre Emerick Aubameyang rompió el marcador.

El elenco de Mikel Arteta no lo liquidó en el primer tiempo y, a los pocos del complemento, el local llegó al empate gracias a un tanto de Jordan Ayew. 

Lamentablemente, el autor del único tanto del Arsenal se fue expulsado por un planchazo asesino a un rival. 

Con este punto conquistado, los Gunners siguen muy lejos de los primeros puestos de la Premier League y tienen complicada la clasificación a las copas.

Fue un partido de dos equipos que están funcionando de forma paralela en la competencia y eso fue lo que se vio: un empate.