En el Benito Villamarín, sin Luis Suárez, Barcelona hizo poco en ataque en el comienzo de la final de la Copa del Rey.
Con chispazos de Lionel Messi y subidas de Nelson Semedo no alcanzó. Para colmo, Valencia salió con todo.
A los 33 minutos, Carlos Soler superó en velocidad a Jordi Alba, desbordó por la banda derecha y centró al segundo palo.
Solo, sin marca, Rodrigo cabeceó de primera un pase a pura velocidad y anotó el 2-0 del Valencia.
Barcelona en modo Anfield.