La última decisión del Tribunal de Arbitraje Deportivo ha generado alivio en Real Madrid y suspicacias en Barcelona.

A dos jornadas del clásico español, el TAD quitó a Casemiro una de las cuatro tarjetas amarillas que llevaba acumuladas, quedando el brasileño con tres.

Esto implica que el mediocampista central no correrá riesgo de perderse el partido contra Barcelona en caso de recibir una nueva amonestación la próxima jornada ante Mallorca.

El Real Madrid había presentado un recurso por la tarjeta que el jugador había visto en Villareal y aunque el comité de competición no atendió a las razones del Real Madrid, si lo hizo el TAD.

En su argumentación, el organismo aseguró que "el examen de las imágenes evidencia el error contenido en el árbitro y por tanto la realidad de la versión que ofrece el club recurrente, siendo las imágenes de meridiana claridad, procediendo la estimación del motivo".