Tottenham ya hizo el cambio: dio salida a Mauricio Pochettino y anunció la llegada de Jose Mourinho para reemplazarlo.

Pese a la destitución y los malos resultados que acumuló en la presente temporada con los Spurs, el argentino sigue siendo uno de los entrenadores más codiciados de Europa.

La más clara prueba de ello es que apenas se supo de su destitución, dos gigantes del continente se pusieron primeros en la fila para buscar su contratación.

Uno de ellos es Manchester United, equipo con el que desde hace tiempo Pochettino viene coqueteando. 

No sería una opción inmediata, sino más a largo plazo, para la próxima temporada. El actual inquilino del banquillo de Old Trafflord, el noruego Ole Gunnar Solskjaer, se mueve está en la cuerda floja y podría seguir hasta final de campaña mientras se cocina el relevo.

El otro es Bayern Munich, que aparece con mayor oportunidad teneiendo en cuenta que actualmente se encuentra a la búsqueda de un nuevo entrenador.

A nadie se le escapa que la situación de Hans-Dieter Flick en el banquillo del Allianz es de total provisionalidad. Parece que ahora puede mantenerse en el cargo, pero el Bayern trabaja en silencio y busca un técnico de prestigio.