Lo que sucedió en la semana nos dejó sin palabras a más de uno. El Liverpool iba a refregar su título de Premier League en la cara del Manchester City, que amenazó con ser su competidor directo pero quedó muy lejos.
De igual manera, los de Guardiola tenían la necesidad imperiosa de demostrar que están a la altura del campeón del torneo local, y lo hicieron.
Fue una goleada 4-0 que sin dudas hizo que por un momento los jugadores de los Reds se olviden de la felicidad por el título conseguido.
+Los goles:
Poco duró ese trago amargo, ya que ante Aston Villa, en Anfield, sacaron a relucir lo justo y necesario para volver a ganar.
Fue 2-0 con goles de Mané y Jones, ambos en los últimos 20 minutos, luego de un duelo muy trabado en mitad de cancha.
Quedan cinco jornadas por disputarse donde se definirán no sólo los descensos, sino qué equipos entrarán a las competencias internacionales de la próxima temporada.