Era la primera pisada de Lionel Messi en el templo donde ascendió a Dios Diego Armando Maradona como jugador.

En el San Paolo, al Barcelona le esperaba un partido muy especial por la ida de los octavos de final de la Champions League.

El dueño de casa, Napoli, se supo menos desde el comienzo, pero hizo casi el partido perfecto de la mano de Gennaro Gattuso.

A la media hora de juego, el local recuperó rápido y Dries Mertens metió un bombazo bárbaro al ángulo para abrir el marcador.

En la segunda parte, Sergio Busquets rompió la última línea del equipo italiano con un pase sensacional y apareció Nélson Semedo, quien pasó para el medio para el gol de Antoine Griezmann.

Casi en tiempo cumplido, Arturo Vidal fue expulsado por ganarse una doble amarilla en una misma jugada: primero por barrer a Mário Ruiz y después por encararlo. Para colmo, Gerard Piqué salió lesionado después de torcerse el tobillo derecho.

Todo se definirá el 18 de marzo, cuando Barcelona reciba al Napoli en el Camp Nou.