Se encendieron las alarmas en el Parque de los Prínicpes con las imágenes que muestran a Neymar saliendo del campo de juego envuelto en lagrimas.

El brasilero se torció el tobillo (si, el mismo que lo mantuvo a mal traer el 2018) y las cámaras lo captaron llorando en su salida.

Su equipo se enfrentaba al Racing de Estrasburgo, por la segunda ronda de la Copa de la Liga de Francia.

Gracias a los goles de Edinson Cavani y Ángel Di María, sus compañeros lograron vencer y perfilarse con un resultado positivo para la vuelta en Estrasburgo.

En las próximas horas se espera un comunicado oficial del PSG en el que especifique el grado de lesión de su gran figura. ¡Qué sea leve, Ney!