Bayern Múnich despidió con honores a tres de los ídolos de su historia reciente: Rafinha, Frank Ribery y Arjen Robben.
Este último, además, anotó el quinto gol de su equipo en la goleada ante el Eintracht Frankfurt que significó un nuevo campeonato para el club bávaro.
El holandés apareció abajo del arco para empujar la pelota tras un centro de David Alaba desde dentro del área.
El tanto significó su gol número 99 con el equipo en Bundesliga y también la frutilla del postre en la goleada por 5 a 1.
Los de Niko Kovac repitieron el éxito de las últimas temporadas y volvieron a levantar el trofeo en la despedida de tres artífices de la Champions 2014.
