Neymar volvió a jugar en PSG tras un periodo de transferencias en el que, confirmó, hizo todo lo que estuvo a su alcance para dejar el club.

Por esta razón, se mostró consciente de que la relación con los aficionados se ha roto, aunque dejó en claro que mucho no lo preocupa.

"Para mí no fue complicado. Estoy muy tranquilo. Todos sabemos lo que sucedió. Entiendo que fue muy difícil para los aficionados, pero a partir de ahora soy un jugador del PSG. Si quieren silbarme, no hay problema", expresó.

A cada palabra, Neymar iba volviéndose más desafiante con la afición parisina y agregó: "Es triste, una pena, pero sabía que iban a hacer eso. Se trata de fútbol, pero al final Dios es muy justo. Ha sido un partido como cualquier otro. Yo ya he sido insultado en otros campos en campo contrario, en Brasil y en Francia. Pero ahora sé que jugaré todos los partidos como si estuviera en campo contrario".

Neymar fue el gran protagonista del encuentro, ya que firmó el tanto de la victoria sobre el Estrasburgo en el descuento, tras un espectacular remate de chilena.