Este sábado, en uno de los encuentros más esperados del fin de semana, Atlético de Madrid y Barcelona se encontraron frente a frente en el imponente y moderno estadio Wanda Metropolitano.

El compromiso tuvo que ver con una nueva fecha de la máxima categoría del fútbol español, entre dos conjuntos que tienen un objetivo en común: quedarse con el título en La Liga.

En ese contexto, y, tal como se esperaba, el partido se presentó muy parejo y equilibrado, con ambos equipos yendo a buscar la portería contraria para hacerse con los tres puntos.

Bajo esa órbita, cuando el partido ya estaba 1-0 en favor de los comanados tácticamente por Diego Simeone, tuvo lugar una jugada que impactó y preocupó a propios y extraños.

Cuando transcurrían jugados 13 minutos de la etapa complementaria, Ángel Correa cayó con todo su peso sobre la pierna de Gerard Piqué, que ya tenía alguna molestia en la zona.

Posteriormente, el experimentado defensor central de Barcelona tuvo que abandonar el campo de juego lesionado y llorando, generando una importante preocupación.