No es algo muy común en él. Lionel Messi siempre es la carta más valiosa para ganar los partidos. Más cuando esos duelos están trabados. Sin embargo, hoy pecó.
Barcelona igualaba 2-2 ante Celta de Vigo en un encuentro donde merecía ganarlo ampliamente y Lionel Messi tuvo el disparo final. Bueno, el disparo no, el cabezazo mejor dicho.
$bp(“Brid_12222960”, {“id”:”8682″,”width”:”800″,”height”:”478″,”video”:”181889″});
¿Qué pasó? La pelota quedó en el aire, el arquero visitante ya estaba vencido, todo el Camp Nou se puso de pie, el delantero de la Selección Argentina cabeceó sólo, pero la tiró afuera.
Sí, increíble. ¡La próxima tendrías que intentar una chilena, Leo!