Ante el Cagliari, Juventus jugaba de visitante con la obligación de comenzar la segunda rueda lo más cerca posible del Napoli. 

Aunque el dueño de casa está a dos posiciones del descenso de la Serie A, a la Vecchia Signora le costó y mucho remarcar su efectividad del juego en el marcador.

Además, los de Massimiliano Allegri debieron recomponerse de la lesión de Paulo Dybala, quien salió en la segunda parte con lágrimas en los ojos.

Su reemplazo, Douglas Costa, minutos más tarde desbordó por la banda y centró para que Federico Bernardeschi anote el 1-0. No obstante, la polémica fue porque el rival pedía que la Juventus tire el balón afuera antes del gol, ya que un jugador estaba en el piso.

Con la polémica como protagonista, Juventus ganó con lo justo y se posicionó a un punto del Napoli. El Calcio está abierto.