Mientras Teófimo López fue campeón mundial pareció imposible que hubiera pelea por el campeonato mundial indiscutible de peso ligero, sencillamente porque este se había autoproclamado con tal status, pasando por alto que para ello le faltaba conquistar el cinturón del CMB que pertenecía a Devin Haney.

En dos semanas, sin embargo, quedó allanado el camino para que pronto haya un combate histórico para la división. En primer lugar por la victoria de George Kambosos sobre Teófimo el pasado 27 de noviembre en el Madison Square Garden, que le permitió al australiano conquistar los títulos de la AMB, la OMB y la FIB; y más recientemente porque ayer mismo Devin haney defendió con éxito  su cinturón del CMB imponiéndose ante Joseph Díaz.

Ambos han manifestado ya su interés de pelear por el campeonato mundial indiscutible. Incluso Haney, que sabe que es Kambosos el dueño de tres de los cuatro títulos, está dispuesto a concederle el deseo de que esa pelea pueda realizarse en Australia. Entonces, solo será cuestión de dialogar.

Pero ni el más optimista de los fanáticos se hubiese atrevido a pensar hace nada más que dos semanas que una pelea por el campeonato mundial indiscutible de peso ligero podría tener lugar nada más que dentro de seis meses; algo que avanzó Eddie Hearn, CEO de MatchRoom Boxing, al decir que es muy probable que la misma suceda en mayo del año próximo.

George Kambosos fue comentarista de lujo para la transmisión de DAZN de la pelea entre Haney y Joseph Díaz. Y luego del combate ambos se encontraron para decirse que estaban listos para pelear por los cuatro cinturones. Si todos los acuerdos en el boxeo se lograran así de fácil, ganarían todos los fanáticos.