Devin Haney sacó adelante una de las peleas más duras de su carrera, imponiéndose por decisión unánime a Joseph Díaz este sábado en el combate estelar de la cartelera montada por MatchRoom Boxing en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, reteniendo así su título mundial de peso ligero del CMB.
Como se venía diciendo desde la previa, la victoria de George Kambosos sobre Teófimo López hacía todavía más especial este combate, pues el australiano ya había dejado claro que estaba listo para enfrentar al ganador en una guerra por el campeonato mundial indiscutible de las 135 libras.
Siendo dueño de los cinturones de la AMB, la OMB y la FIB; Kambosos se ganó el derecho de imponer condiciones y dijo que le gustaría que esa pelea pudiera disputarse en Australia, su país, algo a lo que Eddie Hearn y DAZN parecen estar viendo con muy buenos ojos por la posibilidad de seguir conquistando nuevos horizontes.
Fue por esa razón que inmediatamente después que se leyera el fallo que lo dio como ganador sobre Joseph Díaz on tarjetas de 116-112, 117-111 y 117-111; Devin Haney fue consultado sobre la posibilidad de viajar a Australia a buscar esos cuatro cinturones que le permitan hacer historia grande en el boxeo.
“Vamos, Kambosos. ¡Hagámoslo por todos los cinturones. Que la pelea por el campeonato mundial indiscutible sea la siguiente. Iría hasta Júpiter para pelear con él si tengo que hacerlo”, le dijo a Chris Mannix, dejando claro que no tiene ningún problema con el hecho de ser visitante.
