Cuesta encontrar un fichaje, especialmente cuando se trata de un extranjero que no era popularmente conocido, que genere tan alto nivel de adhesión como el que ha generado el argentino Gustavo del Prete, procedente de Estudiantes de La Plata, entre los aficionados de Pumas.
El sábado, el delantero de 26 años arribó a Ciudad de México para terminar de resolver los detalles de su contrato y realizarse los exámenes médicos de rutina. Este lunes, finalmente, las redes sociales del equipo de la UNAM hicieron su presentación oficial, que sirvió también como termómetro para determinar cuántas ilusiones genera su contratación.
Y es que entre los fanáticos de Pumas se sucedieron los mensajes de cariño, los deseos de buena suerte, las expresiones de felicidad por la confirmación. También hubo lugar para algunos memes ocurrentes. Pero sorpresivemente, porque se sabe el nivel de crítica al que acostumbran los aficionados mexicanos, casi no se vieron mensajes negativos o de desconfianza.
El propio Gustavo del Prete ya había hecho muy bien la tarea cuando explicó a la prensa por qué eligió la opción de Pumas entre otras tantas que tenía sobre la mesa, incluida la de Las Águilas del América.“Era un desafío muy importante. Conozco dePumasdesde hace mucho, cuando jugaba allá enArgentinaen divisiones inferiores. Es un club grande, me gustó el desafío, el proyecto del club”, había dicho.
Los aficionados ya piden que del Prete sea el 10 de Pumas
Como parte de la revolución que generó el anuncio oficial de Gustavo del Prete, muchos fueron los que pidieron que se le entregue el dorsal número 10 para su camiseta, que actualmente pertenece aFavio Álvarez, uno que no viene teniendo la misma suerte de contar con el apoyo unánime de la afición.
