Vicente Matías Vuoso fue un delantero que dejó una grata impresión en su paso por México, principalmente por lo hecho en Santos, equipo donde es uno de los jugadores históricos y por el cual llegó a catapultarse incluso a la Selección Mexicana, donde forma parte de los jugadores naturalizados que vistieron la camiseta verde.
Hoy, que el caso de Rogelio Funes Mori ha causado revuelo con su llamado al Tricolor, el Toro Vuoso platicó con Bolavip y recordó que para él resultó todo un halago que lo llamaran a la Selección de un país que le entregó todo. Además, señaló que el técnico Gerardo Martino es quien se juega la cabeza con la convocatoria del atacante de Monterrey y nadie más.
“Recuerdos, los mejores. Obviamente para uno estar en un país que te da todo y que de repente te llamen a la Selección cuando sólo pueden elegir a 20 o 25 jugadores es un halago. Eso significa que el técnico cree o está consciente de que la persona que llama le puede dar más que el nacido en México. El naturalizado debe de dar un poco más o ser un poco más, siempre en la elección del técnico. El que se juega la cabeza a la hora de llamarlo es Martino, nadie más”, manifestó.
El llamado del Mellizo a la Selección Mexicana obedece en gran medida a la ausencia de Raúl Jiménez, quien se ha recuperado de las consecuencias que tuvo el impacto en la cabeza tras el choque con David Luiz en un partido con Wolverhampton en la Premier League. En ese sentido, Vuoso consideró que Funes Mori sí es un hombre de condiciones similares a las de Jiménez y habrá que apoyarlo porque a la hora de jugar, defenderá a México y no a Argentina.
“Lamentablemente le pasó lo que le pasó a Raúl (Jiménez) y después de eso, creo que le costó encontrar al jugador. Henry Martín lo hizo bien algunos partidos, pero le costó a Martino encontrarlo. No sé si sea el más indicado (Funes Mori), pero para Martino sí y es un punto donde hay que apoyarlo porque a la hora de la hora va a entrar y defender a la Selección Mexicana, no va a defender a la Argentina ni a nadie más. Vamos a tirar todos para adelante y que le vaya bien, para que cuando vuelva Raúl tenga un recambio o sea lo que quiera el técnico en su momento. Para mí sí es de los jugadores más parecidos a Jiménez por el tipo de juego, sin duda; es muy difícil que haya otro como él por lo mismo que pasa de que en la liga hay muchos extranjeros y casi siempre vienen en la columna vertebral como volante central, centrales, arquero y nueve, eso es algo que tapa a los chicos en el sentido de darles más oportunidad, el que tiene que jugar juega, pero si hubiera menos extranjeros tendrían más minutos y dispondrían más de ellos en algún momento”, expuso, al tiempo de agregar que en la medida de que Rogelio tenga buenas actuaciones, la gente se va a olvidar del tema de la naturalización.
“A la hora de la hora va a jugar la Copa de Oro, va a hacer goles y la gente se va a olvidar si es naturalizado o no. Obviamente lo van a juzgar de acuerdo a los resultados, si van las cosas bien no se va a decir mucho, si las cosas van mal lo van a criticar más de lo normal. Es un arma de doble filo, es a lo que nos exponemos por más de tener los mismos derechos, el jugador va con una mochila más de demostrar por qué lo llamaron, tiene que demostrar un poco más que el mexicano de nacimiento”.
En muchas selecciones a nivel internacional es común ver a jugadores naturalizados entre sus filas, pasa incluso en las potencias internacionales, países en donde no suele cuestionarse este tipo de llamados. Sin embargo, desde la perspectiva de Matías, en México se genera un revuelo por un tema cultural debido a la falta de costumbre sobre estas convocatorias.
“Es un tema cultural, no están acostumbrados, no hay esa cultura como en Estados Unidos donde la mitad son naturalizados, como Francia que salió campeón del mundo con mucha gente que es de África o mismo España, que es la mejor cantera y también naturalizan como pasó como Laporte, pasó con Italia y Mauro Camoranesi. Pasa en las mejores selecciones del mundo, salvo excepciones como Brasil y Argentina, creo que, en casi todas, casi siempre tienen jugadores naturalizados”, declaró.
EN EL TOP DE SU CARRERA
Vicente Matías Vuoso resultó un héroe para la Selección Mexicana. Un gol suyo en Canadá salvó a México de quedar eliminado en la ronda previa al Hexagonal de la Concacaf rumbo al Mundial de Sudáfrica 2010, un momento que el guarda como uno de los más importantes en su carrera como futbolista profesional.
“Está en el top 1 o 2. Está en el mismo lugar que el campeonato con Santos, el último gol en el Corona o el primer gol en el Territorio Santos Modelo, esos momentos son indescriptibles. A mí me ven por la calle hoy y me recuerdan ese gol, no se le va a olvidar a mucha gente y a mí menos. Fue devolver un poco de todo lo que me dio México como país, como sociedad, no hay forma de explicarlo, puedo decir mil palabras, pero hay que vivir la sensación de ese momento inigualable”, relató.
Pese a no haber nacido en territorio nacional, Vuoso reconoció la emoción que le generaba ponerse la camiseta verde y cantar el himno nacional junto a sus compañeros en escenarios tan hostiles como San Pedro Sula en honduras o en el Estadio Nacional de Chile durante la Copa América que se jugó en ese país en el año 2015.
“Me encantaba ese momento que vivíamos. Me acuerdo mucho de San Pedro Sula con toda la gente en contra, vas por los pasillos y te tiran cosas, todo en contra y escuchar el himno del país, ver a tus compañeros como lo cantan con el orgullo a flor de piel, se me pone la piel chinita cuando lo digo, no se puede comparar. Ir a jugar una Copa América y ver el estadio lleno de chilenos, con nosotros solos, representando a un país y jugando uno de los torneos más lindos que hay, son cosas que no cambiaría por nada. Es inigualable el sentimiento de cantar el himno cuando toca”, remató.
