Real Madrid logró uno de los fichajes más sorpresivos en el final del mercado de verano. Se llevó a uno de los jóvenes joyas más codiciadas por los grandes: Eduardo Camavinga. El francés de 18 años tomó la decisión más importante de su corta carrera para cumplir su sueño de jugar en el conjunto merengue, incluso rechazando los millones que le ofrecía PSG.
El ahora exjugador del Rennes fue creciendo a pasos agigantados en la Ligue 1. Debutó a los 16 años y ya con 18 era una de las figuras del torneo, lo que lo llevó no sólo a las selecciones juveniles, sino a la Mayor de Francia. Muchos ya lo ponen como el nuevo Paul Pogba y no es para menos teniendo en cuenta sus características.
¿Cómo se gestó su fichaje a Real Madrid? Según apuntan fuentes al diario As, el conjunto merengue lo contrató, pero no como consecuencia de lo sucedido con el caso Kylian Mbappé. Más bien, el factor Mbappé incidió en el propio Camavinga, quien imitó al jugador parisino, ya que rechazó al PSG para jugar en el Santiago Bernabéu.
Al parecer, PSG también estaba haciendo importantes esfuerzos por su fichaje, pero Camavinga eligió al Real Madrid, con el que ya tenía un contrato desde hace un par de semanas. El factor económico no pesó, ya que los franceses le daban mucho más dinero que los españoles, e incluso le pagaban más al Rennes. Pero, primó la idea del jugador, a quien se le respetó la decisión.
A tal punto estaba ansioso Eduardo Camavinga de firmar con Real Madrid, que cambió de agencia de representación, luego de que el anterior Mousa Sissoko no logró el acuerdo con los merengues, algo que sí lo pudo hacer Joshua Barnett.
