Por el Grupo B, el de la muerte, Atlético de Madrid y Porto se repartieron los puntos de su primer partido en la Champions League en un partido aburrido y sin goles en el Wanda Metropolitano. El conjunto portugués estuvo a punto de ganarlo en el final con una insólita jugada. 

A falta de diez minutos para el cierre del partido, la defensa del Colchonero tuvo problemas de comunicación en el área y Mehdi Taremi estaba atento allí para buscar la victoria de los dirigidos por Sérgio Conceição. El delantero iraní estuvo a nada de regalarle los tres puntos a la visita. 

Es que un pase atrás de Renan Lodi, que había ingresado en el complemento, dejó al descubierto la desconexión entre Geoffrey Kondogbia y Jan Oblak. Ninguno de los dos fue a recibir con determinación y Taremi aprovechó para madrugarlos y alcanzar la pelota. 

El atacante asiático remató contra el arquero esloveno, pero el balón volvió a rebotar sobre Taremi y en el trayecto de éste hacia el arco, el delantero la rozó con su mano izquierda mientras caía por el choque ante Oblak. Después de unos minutos, el VAR le comunicó al árbitro Ovidiu Hategan que el gol debía invalidarse.

De esta forma, Atlético de Madrid se salvó sobre el final y mantuvo el empate en el marcador para sumar un punto en el comienzo de la fase de grupos de la Champions League. Por la misma zona, Liverpool obtuvo un valioso triunfo por 3-2 ante Milan en Anfield Road.