No hay dudas de que es el momento para que el Al Hilal se lance nuevamente sobre Lionel Messi para contar con él en la próxima temporada. Si bien el argentino hizo saber que su intención es seguir en la elite para mantener su nivel, la relación quebrada con el París Saint-Germain y las complicaciones económicas del FC Barcelona recrean una pista liberada digna para apretar el acelerador.
Es que encima Arabia Saudita ya es, concretamente, el cuarto en discordia en la historia. Se calzó el atuendo de protagonista al transformar a Leo en su embajador de turismo e invitarlo al país para que disfrute de unos días de las principales atracciones junto a su familia, dinamitando así los intentos que todavía existían en PSG por buscar la extensión.
Mientras tanto, el Fútbol Club Barcelona ve como LaLiga, si bien no lo va a complicar porque es una de las partes interesadas en el presunto regreso de Lionel Messi al fútbol español -con todo lo que eso supone-, no le extiende la mano como para hacerle las gestiones un tanto más sencillas frente a su posición comprometida dentro del fair play financiero.
Y ahí está Al Hilal, que hace semanas ofreció 400 millones de euros (el doble de lo que acordó Cristiano Ronaldo en el Al Nassr) y que entiende que, dadas las circunstancias que brotaron en las últimas horas, no puede dejar pasar la posibilidad de, por lo menos, volver a intentar, incluso con una propuesta aún más suculenta.
De probar nuevamente y de aceptarse, sería el contrato más oneroso jamás realizado en la historia del fútbol. Hoy, todavía se presume difícil, pero más posible que hace unos días.
