El triunfo de la Selección de Brasil frente a su par de Chile dejó muy molesto al presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien es uno de los más futboleros de dicha nación. Claro, a pesar de que los dirigidos por Dorival Júnior contaron con Raphinha, pero no así con Neymar y Vinícius Júnior, el rendimiento no mejora.
Con o sin estrellas estelares, la Canarinha no logra levantar cabeza y está muy lejos de las generaciones de futbolistas como Ronaldo, Romário, Cafú, Ronaldinho, Bebeto, Edmundo y Roberto Carlos, por citar algunos de los que formaron parte del famoso Jogo Bonito. A pesar de la victoria en tierras trasandinas, el andar del seleccionado no es el mejor.
Lejos están de los primeros puestos en la clasificatoria hacia el Mundial de 2026, pero lograron quedar a seis unidades de la Selección Argentina, que lidera en soledad. Y a raíz de ello, el máximo mandatario brasileño fue muy claro al sostener que el pentacampeón mundial “no tiene en este momento tantas estrellas entre quienes juegan en el extranjero”, pero no se quedó allí: “No hay un Garrincha o un Romario jugando en los clubes del exterior, sólo jóvenes que todavía no son estrellas”, sostuvo.
Lula pretende que Dorival Júnior comience a convocar a jugadores del ámbito local, quienes le dieron el triunfo frente a Chile, ya que fueron Igor Jesús y Luiz Henrique, que militan en las filas de Botafogo, los que anotaron los goles. “En Brasil sí hay buenos jugadores, de la misma calidad, y por eso deberíamos darle una oportunidad a los que juegan en el país”, expresó el nacido en Caetés.
Por otra parte, desde Ansa Brasil sostienen que el mandatario de 78 años mantuvo una charla con Ednaldo Rodrigues, el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), a quien le planteó un proyecto similar al que tiene el seleccionado inglés de rugby, donde solamente hay deportistas locales y no aquellos que militan en el extranjero. De concretarse, jugadores como Neymar, Vinícius Júnior, Raphinha, Marquinhos y Endrick quedarían relegados.