Restan apenas un par de semanas para el inicio de la Temporada 2025 de la Fórmula 1, con el Gran Premio de Australia en Albert Park. Sin embargo, los monoplazas de cada escudería ya tocaron asfalto en Bahréin, con los tests de pretemporada y en Red Bull quedó claro algo: no iniciarán como favoritos.
A diferencia de campañas pasadas, donde Max Verstappen y Checo Pérez tuvieron el auto más destacado en los primeros compases del año, ésta vez en Red Bull creen que tanto McLaren como Ferrari están por delante. Así lo admitió el director técnico de la escudería, Pierre Wache, en una reciente entrevista con The Race.
“No fue tan fluido como esperaba, ni como el equipo esperaba, pero es mejor encontrar los problemas aquí que durante la temporada. Estamos aquí para eso, para entender el auto”, reconoció Wache. “El clima no nos ayudó, no fue lo que nos solemos encontrar aquí. Pero tratamos de explorar el potencial del auto y entender cómo responde a diferentes configuraciones, creo que eso lo hemos logrado”, explicó.
“No estoy contento, el auto no respondió como queríamos por momentos. Aún así, estamos en el camino correcto, aunque tenemos que trabajar para la primera carrera y en el desarrollo futuro. Será ajustado, pero de momento no creo que seamos lo suficientemente rápidos. McLaren y Ferrari se ven más rápidos“, completó Wache.
El desafío de Verstappen y Lawson para el 2025
A mediados del 2024, Max Verstappen se enfrentó a algo con lo que no había tenido que lidiar durante sus pasados campeonatos mundiales, un Red Bull inferior a otros autos. El neerlandés sacó gala de toda su capacidad detrás del volante y logró completar la temporada para transformarse en cuatro veces campeón del mundo.
Sin embargo, ahora esa situación no lo encontrará ni a él ni a Liam Lawson con una ventaja de puntos en el campeonato. Sucederá desde el mismo inicio de la temporada, y deberán compensar con manejo, la diferencia que les sacan en rendimiento los McLaren y las Ferrari.
Ese será uno de los aspectos más interesantes en el comienzo del campeonato, en dos semanas en Melbourne y una de las historias a seguir a lo largo del 2025 en la Fórmula 1.
