Pese a que San Lorenzo aun no realizó ventas que le permitan tener ingresos a sus arcas, y mientras negocia con River por Herrera, el Ciclón llegó a un acuerdo con Palestino de Chile para poder levantar así una inibichion que regia por parte de la FIFA a causa de una deuda que viene desde hace mucho tiempo.
En 2018 y luego de dos años en San Lorenzo, Paulo Díaz era vendido al Al-Ahli de Arabia Saudita por un pedido expreso de Pablo Guede, quien lo dirigió en Palestino y en el Ciclón. De esta transferencia, tasada en casi 4.5 millones de dólares, el 50% del dinero debía ir para el equipo chileno.
Si bien la venta parecia realizada corectamente, desde Palestino siempre afirmaron que San Lorenzo no solo no les consultó sobre la venta sino que jamás transfirieron el dinero. Una demanda que llegó a la FIFA, la cual falló a favor del conjunto trasandino dejando al equipo argentino contra las cuerdas.
Con un tiempo de pago superado, San Lorenzo recibió en este 2022 una inhibición por parte de la FIFA debido a que nunca pudo saldar esa deuda. De esta manera, el equipo hoy dirigido por Pedro Troglio quedaba sin posibilidad de utilizar a los cuatro refuerzos que llegaron durante el mercado de pases.
Una situación que, por suerte para Troglio, ya quedó en el olvido gracias a que en este día martes se confirmó que Palestino y San Lorenzo llegaron a un acuerdo por el cual los dirigentes del Ciclón depositaron un total de 1.230.000 en las arcas de lo chilenos levantando la sanción.
De esta manera, tanto Adam Bareiro, Gonzalo Berterame, Malcom Braida y Ricardo Centurión podrán comenzar su participación en la Copa de la Liga a la par del resto del grupo. Grandes noticias para Pedro Troglio en su naciente camino por San Lorenzo de Almagro.