Ni Boca ni Racing se fueron contentos de la Bombonera tras disputar el clásico. A pesar del empate 1-1, el Xeneize extendió su racha negativa a 12 partidos sin ganar y el fastidio en las tribunas se hizo notar. Del otro lado, la Academia dejó escapar en los minutos finales lo que hubiera sido una valiosa victoria, volviendo a Avellaneda con un sabor amargo. Y el descontento visitante lo reflejó a la perfección Gustavo Costas.
El técnico de la Academia, siempre efusivo sobre la línea de cal, también dejó en claro su fastidio a lo largo del encuentro. Al punto que, sobre el final, el DT protagonizó una secuencia que encendió todavía más la temperatura del clásico.
Luego de intercambiar reproches el árbitro Nicolás Ramírez, Costas salió del banco de suplentes y, antes de llegar a la mitad de cancha, tuvo un picante cruce con algunos hinchas de Boca ubicados en la zona de palcos. Posiblemente luego de recibir algún comentario, la secuencia muestra a Costas girando sobre su propio eje y y dedicándole gestos desafiantes con la mano, moviendo la muñeca y el dedo índice en círculos, como invitándolos a “seguir hablando”. Todo esto, mientras sonreía de forma irónica a través de la cámara de ESPN.
Igualmente, el disconformismo de Costas no quedó allí, sino que redobló la apuesta en conferencia de prensa. Ahora, el apuntado fue Nicolás Ramírez. “En el segundo tiempo pasó lo de siempre: cobraban todos foules. El del tiro libre (jugada del empate) no fue foul. No es que lloramos. Nos cobraron 19 faltas contra 6“, soltó acerca del rendimiento arbitral.
Y aprovechó a recordar antecedentes en los que fue dirigido por el mismo colegiado. “Contra Independiente el mismo árbitro 18 contra 2. Te van metiendo atrás. Nos amonestó a todos, 6 o 7 jugadores. Tenemos que hacer 2 o 3 goles para ganar un partido“, cerró Costas.
Ahora, el entrenador deberá cambiar el chip rápidamente: Racing visitará a Peñarol el próximo martes, en el Campeón del Siglo, por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores.
