Tras dos años y medio sin público por Copa Libertadores entre sanciones y la pandemia del COVID, River tuvo el regreso de sus hinchas al Monumental y fue la noche fue una fiesta dentro y fuera del campo de juego.
Fortaleza fue el rival, pero al margen del equipo que había en frente, River también tenía otro desafío pendiente, el cual era ganarle de local a un conjunto brasileño con Gallardo como entrenador, algo que finalmente logró en sus casi ocho años de gestión en el banco riverplatense.
La victoria fue un 2 a 0 contundente desde el juego con dos golazos. El primero de Enzo Fernández desde afuera del área y el segundo Nicolás De La Cruz de volea, también de media distancia.
Los de Núñez fueron mejores desde el arranque y ganaron el encuentro sin grandes sobresaltos, imponiendo su autoridad en los 90 minutos del partido y con el cuarteto ofensivo funcionando como engranajes entre Julián Álvarez, Matías Suárez, De La Cruz y Fernández, con Simón y Enzo Pérez siendo claves. Paulo Díaz regresó tras su cuadro de COVID en la defensa y Andrés Herrera supo reemplazar con altura a Robert Rojas en la banda derecha.
Así, River sumó 6 de 6 posibles y redujo a un equipo brasileño en su casa, por lo que quedó demostrado que la chapa de candidato a ganar esta Copa Libertadores la tiene bien puesta, ya que por más que no será fácil para ningún equipo la conquista de América, los dirigidos por Marcelo Gallardo tienen para ilusionarse.
