A inicios de la semana se destapó en Italia un conflicto entre Leandro Paredes y su entrenador en Juventus Massimiliano Allegri. Todo comenzó con la llamativa ausencia del argentino en el entrenamiento abierto que realizó el equipo el lunes, como parte de una tradicional celebración italiana que se realiza el día después de las Pascuas.
Días más tarde, el propio entrenador reconoció que había existido un conflicto. Se trató de una discusión que previamente se había dado en el vestuario entre ambos porque Paredes sentía que estaba siendo poco valorado debido a la escaza cantidad de minutos que venía sumando en los últimos partidos.
"Hubo una discusión de ideas, porque Leandro ha jugado menos en este período después de haber jugado mucho al principio. Es normal que haya un poco de frustración por esto, pero tomo decisiones basadas en lo que veo. Puede ser útil para el equipo, todos deben sentirse parte del grupo. Estoy contento con la reacción, significa que le importa", había expresado Allegri en la rueda de prensa previa al partido de Europa League ante Sporting Lisboa.
Ayer, quedó claro que las declaraciones del entrenador de Juventus no fueron para salir del paso, porque pese a alinear a Paredes entre los suplentes lo requirió para ingresar al terreno de juego en el complemento del partido que terminó con victoria 1-0 en la ida de los cuartos de final de la competición continental.
Pero previo al ingreso del argentino, se vivió un momento de tensión. Cuando Allegri llamó a Paredes, este no estaba listo para ingresar, lo que provocó un breve ataque de furia del entrenador, aplacado por un integrante de su cuerpo técnico. La escena quedó grabada en el celular de un hincha y no tardó en viralizarse en las redes sociales. ¿Habrá sido el inicio del fin del ciclo de Paredes en Turín?
