El título estaba en manos del Bayern Múnich, la conquista de su 34º Bundesliga, el primer campeonato para Harry Kane como futbolista profesional a sus 31 años. Tan sólo tenía que vencer al RB Leipzig, algo que estaba logrando hasta el minuto 95, cuando sufrió el empate decisivo.
Los bávaros comenzaron perdiendo el encuentro por 2 a 0 en el Red Bull Arena, y sin su goleador (24 goles en esta Bundesliga) en campo, ya que había llegado a las cinco amarillas el pasado fin de semana vs. Mainz y estaba suspendido para este encuentro. Aún así, con goles de Dier, Olise y Sané, logró dar vuelta el encuentro y se encaminaba al título.
Pero apareció el danés Poulsen, en el minuto 95, y cuando ya todos esperaban el pitazo final para celebrar el campeonato y hasta el propio Kane había bajado de la tribuna a pie de campo, empató el partido y le negó la consagración al Bayern Múnich, que ahora deberá esperar.
La reacción de Kane al gol de Poulsen
Bayern Múnich todavía puede ser campeón, sigue siendo el favorito y podría celebrar este mismo fin de semana, si el Friburgo aguanta al Bayer Leverkusen. Si el vigente campeón no logra vencer en su visita al conjunto negro y blanco, los bávaros serán campeones.
En caso de que Bayer Leverkusen logre un triunfo vs. Friburgo, la definición se podría dar en la Fecha 33, cuando Bayern Múnich reciba al Borussia Monchengladbach en el Allianz Arena, el próximo fin de semana.







