36 años después, el hincha argentino volvió a festejar un campeonato del mundo. Para más de una generación es la primera vez y lo vivió con la euforia que corresponde. Tras el triunfo de Argentina ante Francia, la gente salió a festejar.
Como es costumbre, uno de los puntos de reunión es el Obelisco, ubicado en el centro porteño. Allí, la gente continúa desde que terminó el partido, unidos y festejando la tercera estrella de la historia de Argentina, tiñiendo de celeste y blanco la ciudad.
Para mañana a la noche, pasadas las 20, se espera que los hinchas puedan festejar con los jugadores que llegarán desde Doha y se encontrarán con la gente. Todavía, no está definido como será la organización para estos festejos.