Robert Rojas ya comenzó con la recuperación de la espantosa lesión que sufrió el pasado miércoles, cuando por una patada del peruano Aldair Rodríguez sufrió la fractura de la tibia y el peroné de su pierna derecha. El paraguayo ya fue operado y se espera que tenga entre 3 a 4 meses de recuperación hasta poder empezar con los trabajos físicos, los cuales le demandarán unas cuantas semanas más hasta que pueda regresar al campo de juego de manera oficial.
Sin embargo, cuando se creía que lo peor para el “Sicario” había quedado atrás, el sábado,escasas horas pasadas su operación se dio a conocer una nueva y alarmante preocupación para todo el Mundo River. Es que desdela Clínica Trinidad de San Isidro, lugar donde Rojas fue operado, dieron a conocer que el paraguayo tuvo un espasmo coronario, un cuadro cardíaco que llegaron a controlarlo rápidamente con un gran accionar médico.
¿Qué es un espasmo coronario? Es unacontracción temporalde los músculos de la pared de una de lasarteriasque envían sangre al corazón.Esta contracciónpuede disminuir o bloquear completamente el flujo sanguíneo a una parte del corazóny si no se controla a tiempo o dura lo suficiente, puede producir un paro cardíaco o generardolor en el pecho. Afortunadamente para Rojas, fue detectado a tiempo y pudieron estabilizarlo en la clínica, pero no quedan dudas que esto causó consternación e incertidumbre en los médicos y en River.
Al tratarse de una situación cardíaca, claramente lo futbolístico pasa a un segundo plano por la peligrosidad del asunto. Es por eso que Rojas permanecerá en la Trinidad de San Isidro internado hasta constatar que su salud no correrá riesgos. Lógicamente, esto podría hacer que el proceso derecuperación de su fractura se ralentice un poco, Mientras tanto, desde River están atentos a su situación y esperan que su situación mejore, así como que tampoco se repita este preocupante parte médico.
Este domingo le seguirán haciendo estudios para determinar el origen del espasmo coronario, y así poder tratarlo de manera propicia. En principio, desde el conjunto de Núñez lo esperan con consternación y con la ilusión de poder verlo en el campo de juego lo antes posible. ¡Fuerza, Robert!