En las últimas presentaciones, River no estaba teniendo su mejor presente futbolístico, ya que en los últimos 9 partidos, el Millonario solamente pudo cosechar dos victorias. En esa racha adversa, el club de Núñez no logra hacer pie en el arranque de la Liga Profesional y en paralelo quedó eliminado de la Copa Libertadores en octavos de final ante Vélez. Por eso, seguir en un correcto rumbo en la Copa Argentina resultaba clave para River.
En este sentido, los dirigidos por Marcelo Gallardo lograron un gran triunfo ante Barracas Central, donde golearon por 3 a 0con los goles de Milton Casco y Agustín Palavecino por duplicado. En el Estadio La Pedrera de San Luis, River obtuvo el pase a octavos de final de la Copa Argentina y deberá enfrentarse a Defensa y Justicia en dicha instancia.
Y en todo este contexto de irregularidad, el propio Gallardo se sinceró y habló sin filtro con TyC Sports. Primeramente, el “Muñeco” profundizó sobre la importancia de ganarle al Guapo: “Necesitábamos un partido para volver a creer en nuestro juego y recuperar confianza, que es lo más importante. Cuando venís de golpes duros siempre es bueno tratar de salir rápido. Hoy fuimos sólidos. Ahora tenemos que construir un equipo nuevo, que vuelva a reconocerse“, fue lo que sentenció sobre esto.
Luego, fue un poco más allá y remarcó que los altibajos en River lo tienen con un particular estado de ánimo: “Estoy como me ven. Mis actitudes hablan por sí solas. Intento controlarlas, pero a veces cometo errores como todos. Y en los momentos difíciles donde hay que mantener la templanza, se me van algunas cosas. Vivo y siento así. Después me corrijo porque sé el lugar que ocupo“.
Para cerrar, Marcelo Gallardo analizó que su equipo tuvo una gran actuación ante Barracas Central pero cuestionó el arbitraje, al cual consideró que no estuvo a la altura de parte de Andrés Merlos. Al margen de esto, River se impuso de gran manera ante el conjunto de Alfredo Berti en San Luis y tras la contundente victoria por 3 a 0, el Millonario ya se encuentra en octavos de final. Sin dudas, un partido que trae alivio en Núñez y al entrenador en sí.







