A fuerza de goles, calidad, polémicas, peleas ydesamores con dos de las aficiones más importantes de México, Nicolás Castillo se convirtió en uno de los referentes ofensivos de la Liga MX.Con la excusa de su cumpleaños,Bolavipdecidió repasar la carrera del goleador en México.
Goles, lesiones, peleas y partida de Pumas
El surgido en Universidad Católica arribó a Los Universitarios luego de una amarga experiencia en Europa. De todas maneras, rápidamente llevó a su equipo a los primeros puestos y se alzó como uno de los mejores centrodelanteros de la liga. Sin embargo, las lesiones no lo ayudaron y complicaron su estadía.
Su paso porelelenco del Pedregal fue cortopero revolucionario: marcó 26 goles en 45 partidos, se ganó el respeto de la afición y hasta tuvo una dura pelea con quien luego iba a ser su entrenador: Miguel Herrera.
En un enfrentamiento entre Pumas y América por los Cuartos de Final de la Liguilla en 2018, el ariete gritó: “Piojo, que te entreguen ya la copa” luego de la expulsión de su compañero Marcelo Díaz.
Benfica
Con esos pergaminos, El Bombardero arribó a Benfica para tener revancha en Europa. Sin embargo, nofue lo que esperaba: apenas disputó 11 partidos y no marcó goles.Con muy pocas oportunidades de jugar, regresó a México, pero no al lugar que había prometido anteriormente.
Refuerzo bomba del América y trombosis
Luego de asegurar que en el país “solo jugaría en Pumas”, Castillo arribó al América en medio de desencuentros y un enojo total de su exclub y una algarabía indisimulable de la afición de su nuevo equipo.
Si bien su arranque fue prometedor, poco a poco fue bajando el nivel y se convirtió en el blanco de las críticas por su rendimiento en los encuentros más importantes de la escuadra de Coapa.
El 18 de enero de 2020 jugó su último partido en Las Águilas: una trombosis lo sigue intentando de alejar de las canchas para siempre, pero él resiste con la misma fuerza que tuvo para sobresalir.
A más de cuatro años de su debut en el país azteca, Nicolás Castillo, un delantero tan fenomenalcomo polémico, atraviesa lo que se espera que sea la parte final de su recuperación.
