Hace corto tiempo se hizo popular el nombre de Endrick, en el argot de los futboleros en el mundo. Es apenas un adolescente que hace parte de Palmeiras, y por su tremendo talento es observado por varios de los grandes clubes del fútbol grande de Europa.
Fue la gran figura de la Copinha, un torneo de tradición en tierras Paulistas, precisamente en un torneo que tuvo como la final un partido ante Sao Paulo. El futbolista fue ojeado por scoutings y para ir dilucidando su futuro fue invitado al Viejo Continente para que fuera saboreando las mieles del fútbol primer nivel.
En su viaje inició visitando la cancha de Barcelona, precisamente, asistitió al partido de los Blaugranas ante Napoli, por los dieciseisavos de final de la Europa League. Compartió imágenes en redes sociales con corazones azules y rojos e, incluso, tuvo la oportunidad de reunirse con Dani Alves, uno de sus referentes.
Claro está, que días antes se le vio el partidazo de Champions League entre PSG y Real Madrid, en el Parque de los Príncipes. De ahí pudo ver a un hombre que lo inspira como lo es Kylian Mbappé. De hecho, él ya había dicho que su estilo de juego es similar al del campeón el mundo en 2018.
Pero para la prensa en España, el futbolista, junto con su padre, que fue la persona que lo acompañó en su travesía europea, su futuro estaría mucho más cercano a la Casa Blanca; y todo esto precisamente por sus posteos, y los de su progenitor, en redes sociales.
Viendo al cuadro Merengue, el sábado 19 de febrero, y en la victoria 3-0 sobre Alavés, compartió una seguidilla de imágenes. La primera, el bus del club llegando al coloso madrileño. La segunda, una de los trofeos de la Champions League y la tercera una de la cancha con los dos equipos en el césped; claro está que las dos primeras fueron compartidas por su padre.