El Atlético Madrid de Simeone, con todas sus figuras, no pudo mantener la buena racha en su visita al Valencia. 

Por la primer fecha de la La Liga, un partido muy disputado se dio en el primer desafío después de ganar la Supercopa de Europa ante el Real Madrid.

Claro, no es que en los papeles parecía un encuentro sencillo. Pero el gol de Ángel Correa después de un pase quirúrgico de Antoine Griezmann insinuaba buenas cosas para los Colchoneros.

 

La fiesta se aguó cuando a los 57 minutos, Rodrigo empató el encuentro con un verdadero golazo. Después de dos pases por el aire, el delantero la bajó de pecho y con mucha tranquilidad, dejó a Oblak sin posibilidades.

El comienzo de La Liga no fue el esperado para los de Madrid, aunque un empate en una cancha difícil no está nada mal. 

+La foto de Messi de la que todos hablan: