Cambió el partido por completo. Zinchenko cortó un claro contraataque y dejó a su equipo con 10 al ver la segunda amarilla. 

Desde ahí, el Tottenham comenzó a atacar con todo al Manchester City. Pocos minutos después de la roja, llegó el primer gol.

Lucas Moura realizó una genialidad y engañó a todos: parecía que iba a tirar el centro por la forma en la que movió su cuerpo, pero terminó dando un pase.

La pelota le cayó a Bergwijn, quien hacía su debut con la camiseta de los Spurs, bajo las órdenes de José Mourinho.

¿Cómo respondió? Parándola de pecho y clavando un verdadero golazo para el 1-0 parcial, que luego Son ampliaría a 2-0. 

+El gol:

Tiempo después, el autor del tanto se lesionó, pero sin dudas el saldo de su jornada va a ser más que positivo. ¡Un crack!

Mientras tanto, Liverpool ve todo esto y sonríe, sabiendo que es imposible que se le escape la Premier League.