Este domingo a la mañana, en Inglaterra la previa de las transmisiones televisivas eran sobre la previa de Manchester United y Liverpool y la expectativa de saber si hoy Manchester City se iba a consagrar campeón o no. Los de Pep Guardiola necesitaban que ganen los de Klopp para levantar la Premier League.

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Sin embargo, algo inesperado pasó a dos horas del encuentro: miles de fanáticos del Manchester United pasaron los controles de seguridad de los alrededores de Old Trafford e ingresaron al campo de juego repletos de bengalas de humo y banderas a modo de protesta.

¿Por qué lo hicieron? Los hinchas exigen la dimisión de Malcolm Glazer, dueño del club, y piden que la institución sea nuevamente de los socios. Recordemos que la familia Glazer maneja a los Diablos Rojos: dos de sus hijos son los co-propietarios. La polémica de la Superliga Europea había sido la gota que rebalsó el vaso.

Por la magnitud de las protestas, después de más de una hora de demora, los directivos de la Premier League decidieron finalmente postergar el encuentro entre Manchester United y Liverpool. Por ende, Manchester City tampoco sabrá hoy si es campeón este fin de semana.

Desde Inglaterra informan que todavía no hay fecha para se juegue finalmente el partido y todavía los alrededores de Old Trafford siguen convulsionados por las protestas de los fanáticos de los Diablos Rojos. Escándalo en la Premier.