Josh Taylor no dejó lugar a las dudas el último sábado en el Virgin Hotels Las Vegas, donde derrotó por decisión unánime a José Carlos Ramírez para coronarse campeón mundial indiscutible de la división de peso súper mediano. Incluso pudo acabar antes con el américomexicano, pues lo mandó a la lona en dos rondas consecutivas.

Habiendo bajado paulatinamente la euforia con el correr de los días, el escocés se permitió reflexionar sobre esa victoria y aseguró que la única razón por la que no finalizó a su rival fue el proceder del árbitro de la peleaKenny Bayless, quien a su entender dio a Ramírez un tiempo excesivo para recuperarse de su segunda caía, en el séptimo asalto.

Pienso que el árbitro le dio demasiado tiempo. Esa caída debería haber terminado la pelea. Sentí que hizo la cuenta demasiado más larga de lo necesario”, comenzó diciendo. Y agregó: “Si a la vuelta le hubiese quedado un poco más de tiempo, lo hubiera finalizado de todos modos. Realmente lo estaba agitando en ese momento y entonces sonó la campana”.

Más allá de esas sensaciones, justo cuando José Ramírez fue también crítico de la actuación del árbitro en otros aspectos, como el dejar que el británico se amarrara más de lo debido y el dejar pasar algunos golpes de conejo, Taylor destacó la actuación del américomexicano y la manera en que se repuso de sus caídas.

“Fue muy duro.Quiero decir felicitaciones a Ramírez. Fue un tipo muy, muy duro. Luchador duro. Qué campeón fue. Gran persona también. No tengo nada más que respeto por él y admiración por él, más ahora después de esa pelea. Fue un muy buen campeón, luchador. Lo lastimé un par de veces y después que lo derribé, toda la pelea fue en mis términos”.