Si por una razón afectó tanto a Anthony Joshua la nueva derrota sufrida ante Oleksandr Usyk, esta vez en fallo dividido en la revancha que tuvo lugar el pasado 20 de agosto en Arabia Saudita, es porque pensando a futuro deberá hacerse a la idea de no participar de una pelea que ponga en juego títulos mundiales después de más de seis años.
Para la reconstrucción de la carrera del británico, Eddie Hearn, CEO de MatchRoom Boxing, ya tiene planeada una gira que lo llevará por distintos rincones del planeta y la marcada intención de dar lugar a su regreso antes que finalice el año, probablemente en diciembre, para lo que todavía se está estudiando y buscando al mejor rival.
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Después de eso, el propio promotor señaló que le gustaría que Anthony Joshua pudiese tener revancha ante Dillian Whyte, a quien venció por nocaut técnico en el séptimo asalto allá por diciembre de 2015, antes de volverse campeón mundial por primera vez en su carrera.
Pero toda esa planificación podría cambiar ahora que a los ojos de AJ se presenta la inesperada oportunidad de pelear una vez más por un título mundial, mucho antes de lo que cualquiera, incluso él, hubiese imaginado. Sucede que Tyson Fury se mostró dispuesto a exponer su cinturón del CMB enfrentándolo si se demora en exceso la posibilidad de realizar el combate por el campeonato mundial indiscutible ante Oleksandr Usyk.
“Sigo pensando que, aunque ha perdido tres de sus últimas cinco peleas, a la gente le gustaría ver esa pelea entre nosotros. Si la pelea con Usyk no sucede, entonces iremos y le ofreceremos una pelea a Joshua. Todos tienen que hacer lo que tengan que hacer en esta vida y no es de mi incumbencia lo que haga Joshua después de esa pelea (con Usyk)”, expresó El Rey de los Gitanos en diálogo con BTSport.
