"Es genial traer a Daniel de vuelta a la familia Red Bull. Tiene un enorme talento y un carácter tan brillante. Sé que toda la fábrica está emocionada de darle la bienvenida a casa", fueron las declaraciones de Christian Horner en la jornada de este miércoles, cuando la escudería austríaca hizo oficial el regreso de Ricciardo de cara a la temporada 2023. Esto, evidentemente, generó preocupación en los fanáticos mexicanos.
Claro, Max Verstappen tiene contrato hasta 2028 y es el piloto estrella del equipo; mientras que Sergio Pérez está vinculado hasta el 2024 pero está obligado a demostrar todos los fines de semana que está a la altura de las circunstancias. ¿El australiano llegó para meterle presión a Checo? Ya hay una respuesta.
El propio Horner, jefe de Red Bull, admitió en conferencia de prensa que la confianza está puesta en Pérez: "El contrato con Ricciardo es muy específico (será tercer piloto y reserva). Tenemos dos años más de contrato con Pérez y los dos (junto con Verstappen) se entienden estupendamente, como demuestra los cinco dobletes esta temporada y el título de Constructores".
"Los dos pilotos han contribuido a este último en términos de puntos. A inicios de este año firmamos por dos años más Checo y en esta temporada ha hecho un gran paso adelante", apuntó con contundencia el directivo. De esta manera, llevó tranquilidad a los mexicanos y dejó bien en claro que tiene el asiento asegurado.
Christian Horner volvió a hablar de Sergio Pérez-Max Verstappen
"La causa principal de lo sucedido (en Brasil) es que no habíamos hablado de este tema antes del Gran Premio. Hubiéramos tenido que pensar en todos los escenarios posibles y fue un error no hablar de ellos antes de la carrera y haber establecido un plan claro. Lo que sucedió es de lamentar, pero lo abordamos enseguida después de la carrera, de forma rápida, abierta y transparente. Los dos han sido claros, abiertos y honestos con su compañero. La dinámica entre ambos es buena", sentenció el jefe.
