Todos imaginábamos que iba a tener un partido cuidadoso, por lo que significaba su momento previo a este duelo. Brasil salió con todo ante Corea del Sur, con la carne puesta en el asador, demostrando que no tiene medias tintas. Y uno de los llamados a ser el mejor en este cotejo, era él, pero hay una serie de puntos seguidos.

Neymar Jr era la gran novedad para La Canarinha desde un inicio, asumiendo el rol de control absoluto, con un funcionamiento basado en la velocidad y el talento absoluto. Aquí es donde entran jugadores como Richarlison, Paquetá, Raphinha, entre otros. Sin embargo, una duda dejó el astro principal de este ataque avasallador.

El astro del Paris-Saint Germain no estuvo del todo fino, todavía un poco lento en las relaciones, y las propias decisiones. No vamos a decir que desentonó, porque sería eso mentir a nuestro público. Lo cierto es que se nota mucho, que está saliendo de una lesión compleja.

Aquella que lo borró de toda la fase de grupos, apenas inició el Mundial Qatar 2022. Desde ahí se mentalizó para estar en óptimas condiciones en los octavos de final de esta competencia, ese fue el diagnóstico dejado por el cuerpo médico. Así como lo dictaminaron se cumplió, lo cual es muy positivo por donde se vea.

Para cerrar este breve análisis, debemos señalar que anotó uno de los tantos, desde el punto penal, el segundo, con su clásica paradita previo remate. Siendo cambiado a los 81′, ingresando por él, Rodrygo Goes. Nota aprobatoria para el nacido deportivamente en Santos, que enamoró a todos en el FC Barcelona, y hoy destaca en la Ligue 1 de Francia.