Barcelona sigue acelerando con su ‘Operación salida’ donde espera poder encontrarle nuevos equipos a sus jugadores prescindibles. Uno de los nombres más rutilantes que aparece en esta lista es Memphis Depay, quien pese a tener una buena pretemporada y con goles, Xavi Hernández prefiere optar por otros delanteros y el neerlandés quiere otro desafío ante la falta de minutos.
Memphis ha estado entre las opciones como delantero para varios equipos en Europa. Desde Manchester United y Borussia Dortmund hasta el que más se ha movilizado hasta el momento, que es Juventus. ‘La Vecchia Signora’ quiere sumar un atacante debido a la reciente salida de Álvaro Morata, quien retornó a Atlético de Madrid. Memphis sería el indicado para reforzar la delantera, sobre todo por su variante de hacerlo por el sector izquierdo.
Las negociaciones han ido avanzando en las últimas horas a tal punto que el diario Tuttosport asegura que Memphis ya tiene un acuerdo con Juventus por su contrato. Sería por dos años con un sueldo de seis millones de euros por temporada. Es decir que cobrará unos 12 millones de euros en total por sus servicios en Turín.
¿Qué falta para que Memphis Depay sea nuevo jugador de Juventus?
Tras el acuerdo entre el delantero y el club ‘bianconero’, resta únicamente que Barcelona dé el visto bueno para su salida. En esta parte, las negociaciones todavía siguen, ya que hay distintas intenciones. El neerlandés quiere salir con la carta de libertad y firmar como agente libre en Juventus. Sin embargo, el conjunto catalán desea sacar provecho ante la oportunidad de vender a uno de sus mejores activos.
Memphis Depay marcó dos goles en la pretemporada con Barcelona (Getty Images)
Según ha revelado el diario Sport, la buena relación entre las directivas de ambos clubes ha impedido que las negociaciones queden inconclusas ante la voluntad del jugador. En tal caso, los intermediarios de la operación podrían acordar un monto de traspaso bajo, pero con bonus a futuro que restarían acordar. A Juventus le cierra esto, ya que no incurriría en una infracción de ‘fair play financiero’, algo que busca evitar.
