Las cuentas del Barcelona han ejemplificado nuevamente la dura y cruel situación del equipo a nivel económico. En tiempos donde tanto se habla del deseo del club por volver a contar con una estrella de élite para la próxima década, el fichaje de Erling Haaland se encuentra en un punto donde solo un giro de guion podría cambiar las verdaderas intenciones de Joan Laporta con el noruego.
Barcelona cuenta con el peor límite salarial de LaLiga y en Cataluña no niegan que la operación Erling Haaland alcanzará tintes históricos. Desde el seno del noruego pretenden un salario a la altura de los mejores del planeta, así como una serie de comisiones que chocan directamente con las posibilidades del equipo Culé de pujar por el Androide.
Solo la llegada de ingresos masivos como el CVC o la Superliga podría darle algo de margen al club para volver a situarse de lleno en la carrera por el fichaje de un Erling Haaland que apunta a ser del Real Madrid o del Manchester City en la próxima temporada bajo este contexto. Desde Sport revelan que Joan Laporta era consciente de lo que implicaría un hipotético arribo del noruego y que el plan inicial no pasaba por este verano.
Joan Laporta: Getty
Objetivo 2023
Barcelona buscaba convencer al delantero de permanecer un año más en Borussia Dortmund para poder así arreglar sus cuentas y abrir margen a semejante operación. Algo que también buscaban en Real Madrid ante la llegada de Kylian Mbappé y su imponente contrato al Bernabéu, pero que el arreón final del Manchester City acabó obligando a los Merengues a meterse de lleno en la puja por la que será la novela del verano.
En Cataluña esperan por un ingreso en plusvalías o beneficios que de algo de posibilidades al club de meterse nuevamente en la puja más cara de la última década. Barcelona necesita algo más de 200 millones de euros para poder asumir la llegada de un Erling Haaland que en el Camp Nou pretendía empezar a disfrutar desde el 2023.