El barrio de Fulham atraviesa sus tiempos más revueltos desde que Roman Abramovich se hiciese con un equipo cuya historia nunca volvió a ser igual. Chelsea vive una autentica revolución puertas adentro producto de la guerra que se vive al este de Europa. Tras haber delegado sus funciones como CEO de la entidad, los herederos del magnate ruso amenazan con renunciar a su cargo en la fundación que debía regir el club. ¿Y ahora?

Repasemos rápidamente. La guerra entre Rusia y Ucrania ha generado un ambiente de crispación en la Premier League, donde gracias a su relación con el gobierno de Vladimir Putin las cuentas de Roman Abramovich podrían ser congeladas. Dicho hecho llevó al dueño del Chelsea a delegar sus funciones a seis fideicomisarios de la fundación del club para evitar a corto plazo una venta del equipo que preside desde hace casi dos décadas. Hasta aquí el plan parecía seguir su curso, pero las divisiones en Stamford Bridge amenazan con romper todo.

 

Bruce Buck, Emma Hayes, John Devine, Sir Hugh Robertson, Paul Ramos y Piara Powar son los nombres de los herederos que pretendía Abramovich para su Chelsea mientras la guerra continúe. Si bien todo apuntaba a un traslado de poderes organizado y claro, desde The Sun asegura que al menos dos de los mencionados estarían dispuestos a renunciar a su cargo.

Abramovic y Azpilicueta con Chelsea: Getty

Abramovic y Azpilicueta con Chelsea: Getty

¿Y ahora?

Los seis fideicomisarios se habrían reunido horas atrás para discutir como debería manejar la Fundación Chelsea un club que sin el dinero de Abramovich en primera persona sufrirá cambios de peso. Hay dudas en cuanto a la viabilidad del proyecto en este sentido, así como de la imagen que daría la entidad en tiempos donde la guerra entre Rusia y Ucrania salpica a los Blues jornada a jornada.

De momento la Fundación no acepta el cambio de mando en un Chelsea donde todo apunta a nuevas reuniones para saber hasta que punto podrá Abramovich delegar sus funciones. The Sun asegura que si dos de los seis fideicomisarios renuncian a sus cargos, el magante ruso tendrá que buscar nuevas vías para evitar la venta del club en los próximos meses.