Han pasado siete meses desde que asumió su mandato tras el desastroso ciclo de Josep María Bartomeu. Joan Laporta ha tenido mucho trabajo desde su arribo como presidente del FC Barcelona. Muchos problemas económicos y, en el último tiempo, deportivos llevan a un trabajo complejo en las oficinas del club. De todas maneras, su presente no se compara con lo que hizo en el pasado verano.

Laporta atendió al diario Sport para una entrevista donde analiza este tiempo como presidente de Barcelona, los proyectos que tiene a futuro, sobre todo con respecto al Camp Nou y a lo que piensa hacer para recuperar el prestigio del club y ser "el mejor equipo del mundo". Entre sus declaraciones, destacan sus palabras al hablar del momento más doloroso que vivió en estos siete meses: el adiós a Lionel Messi.

El mandatario 'culé' no duda a la hora de la consulta sobre el momento más doloroso que le tocó vivir, a diferencia de lo mejor que le ha pasado. Un contraste llamativo. "Lo más doloroso ha sido la marcha de Leo Messi. Lo mejor es la consecución del crédito de 595 millones de Goldman Sachs. Esto nos permite disponer de una cantidad para pagar compromisos a corto plazo y nos da aire para seguir adelante", afirmó Laporta.

Respecto a la salida de Messi, amplió sus sensaciones: "Fue un momento muy triste. Como costumbre, intento mirar hacia adelante y no estar revisando constantemente el pasado porque me saca energías para avanzar. Fue triste, doloroso. Me hubiera encantado que yo fuera el presidente que le ayudase a estar en el primer equipo y ser el presidente que le viera siempre en el Barça. No pudo ser".

Pero, más allá de esto, busca dar vuelta la página y solucionar los problemas actuales. "Estamos convencidos de arreglar esta situación. Vamos en el buen camino para que el Barça vuelva a estar donde le corresponde en el mundo del fútbol, que es un sitio de referencia, pero esto no se hace de hoy para mañana. Con todo lo que hacemos, volverá la alegría al barcelonismo", aseguró.