Solamente tiene 18 años, pero juega con la soltura de un experimentado treintañero. Valentín Barco, con tan solo dos partidos en Primera División con la presencia del público (debutó en plena pandemia), logró meterse a los hinchas de Boca en el bolsillo y se llevó una ovación después del éxtasis que se produjo en La Bombonera tras el agónico triunfo ante Deportivo Pereira.

El lateral izquierdo que logró firmar la renovación de su contrato, y que en medio del tremendo partidazo que disputó por la CONMEBOL Libertadores se enteró que quedó preseleccionado en la Selección Argentina para el Mundial Sub-20, analizó lo que es su presente, además de que le agradeció a todos los hinchas por las constantes muestras de afecto.

A pesar de que no logró emigrar hacia Getafe, uno de los principales interesados en contratarlo, Barco está muy contento por la confianza que le dio Jorge Almirón, como así también se refirió a los hinchas, quienes corearon su apellido: "Es un orgullo enorme, la gente me banca mucho, agradezco el cariño y trato de devolver todo dentro de la cancha", manifestó en ESPN.

Depués de que Martín Payero y Sebastián Villa le quitaran la oportunidad de ejecutar un tiro libre, el Colo podría haberse molestado. Pero como jugó en favor de Boca, de hacer lo mejor para el equipo y poder obtener el ansiado triunfo, manifestó que "trato de hacer lo mejor para el equipo, si toca patear los tiros libres, voy a patear. Doy muchas gracias a la gente de Boca por bancarme todos los días".

Sobre el final, confesó cuáles fueron las palabras que le manifestaron sus compañeros una vez que culminó el partido: "Me felicitaban, me decían que siga así. Los grandes saben lo que trabajé para tener esta oportunidad y ahora trato de devolvérselo adentro de la cancha", enfatizó Barco, que ilusiona a todo el pueblo boquense.