Boca y Corinthians estaban sacándose chispas, como sucedió en Brasil, por la revancha de los octavos de final en la CONMEBOL Libertadores. Y no era para menos, ya que las llaves eliminatorias se juegan a 'matar o morir'.

Cuando los comandados por Sebastián Battaglia estaban en pleno ataque, tras un centro de Frank Fabra, Raúl Gustavo saltó a cabecear y terminó dándole un codazo a Guillermo Fernández, quien terminó sentido en el suelo.

Finalizada la jugada, el árbitro uruguayo Andrés Matonte se dirigió hacia el VAR y terminó por sancionar la infracción. Acto seguido, amonestó al defensor central brasileño. Pero al momento de ejecutar el penal, Darío Benedetto rompió todos los pronósticos.

El goleador de Boca, que cumplió 100 partidos con la azul y oro, no logró poner al Xeneize arriba en el marcador. Su remate fue muy esquinado, prácticamente mordido, y la pelota estrelló contra el poste.