Con la esperanza vigente de meterse en la UEFA Europa League, el Leeds de Marcelo Bielsa visitaba a un Burnley que ya cumplió su objetivo, que era no perder la categoría en la Premier League. El equipo visitante buscaba sumar de a tres para seguir con la ilusión de jugar una copa internacional.

En el primer tiempo no se vio lo que habitualmente acostumbra a mostrar el conjunto del Loco, ya que no hubo muchas emociones ni grandes chances para que alguno de los dos equipos se pusiera en ventaja. Todo indicaba que la etapa inicial iba a terminar igual que como empezó.

Sin embargo, cuando todo se acababa, Mateusz Klich encontró terreno para avanzar y, ante la falta de opciones de pase, sacó un remate lejano a colocar para que le pelota ingrese cerca del palo izquierdo del arquero Bailey Peacock-Farrell. De esta manera, a los 44', la visita se ponía en ventaja.

Ya en el complemento, a los 14', se empezó a definir la historia. Alioski remató desde la medialuna tras un rebote de un corner y Jack Harrison la desvió con el taco para marcar el segundo tanto del mediodía en Inglaterra.

Cuando ya quedaban 15' para el cierre, Harrison volvió a aparecer en escena, pero para vestirse de asistidor. El mediocampista puso una pelota filtrada perfecta para Rodrigo Moreno, que quedó cara a cara con el arquero y definió con un sutil remate bombeado. Dos minutos más tarde, el español volvió a picar entre los dos centrales y anotó el cuarto luego de eludir al arquero.

 

De esta manera, los del Loco sumaron tres puntos vitales para seguir en la pelea para ingresar a la Europa League. La próxima cita será el martes como visitante ante Southampton.