Aldosivi llegaba con cinco victorias al hilo y tercero en el grupo B de la Copa de la Liga, por lo que los comandados por Martín Palermo gozaban de un presente magnífico en la previa del encuentro contra Independiente.

El Rojo, en cambio, llegaba con dos empates consecutivos en el ámbito nacional ante Tigre y Colón, sumando entre los últimos encuentros una victoria y una derrota por la Copa Sudamericana, posicionado entre los equipos que buscan sumarse a la pelea de los cuatro que se meten en playoffs, cuando ya quedan solo tres fechas para terminar la primera fase de la Copa LPF.

De 11 partidos jugados, Independiente empató 7, símbolo total del presente del conjunto de Avellaneda, quien con entrenador nuevo como con la presencia de Eduardo Domínguez, el Rojo aún le busca la vuelta al funcionamiento del equipo, en paralelo con el intento de sacar la máxima cantidad de puntos posibles y así tratar de luchar por ambos frentes, por más que en la Copa de la Liga ya está con pocas posibilidades.

Ante el Tiburón, Independiente comenzó perdiendo con un golazo del inoxidable e histórico Santiago Silva. El Tanque hizo alusión a su apodo y sacó un cañonazo para que su compatriota Sosa no llegue bajo ningún aspecto a atajarla, por lo que tuvo que ir a buscarla adentro.

Sin embargo, el partido dio un giro de 180 grados cuando Leandro Maciel vio la tarjeta roja, dejando a Aldosivi con uno menos y cambiando rotundamente el planteo de Palermo, teniendo que cerrarse defensivamente. Aún así, Independiente flaqueó esa defensa y bajo los pies de Tomás Pozzo, el Rojo puso el 1 a 1 en el primer tiempo que terminó siendo la cuenta definitiva en el marcador. Quedó la sensación de que, con 11, el partido se lo quedaba el Tiburón, y que Independiente no supo aprovechar la superioridad numérica durante 60 minutos. A pensar en la próxima fecha.