No hubo futbolero que no se haya entusiasmado con el ingreso de Lionel Messi en Inter Miami. El 10 entró al campo de juego y le sacó una diferencia abismal al resto. Corrió, gambeteó, asistió y terminó cerrando la noche con un golazo de tiro libre en el último minuto para ganar 2 a 1.
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Por supuesto que el DRV PNK Stadium se vino abajo apenas ingresó la pelota al arco, muchos sin poder creer lo perfecto que se había dado todo. Uno de los que se emocionó fue el mismísimo David Beckham, propietario del club, que no ocultó su emoción por lo que estaba sucediendo.
El inglés fue tomado por la transmisión oficial y era un mar de lágrimas, quizás por todo el trabajo que le llevó convencer a Lionel de que llegue a Miami, o simplemente por la alegría de verlo vistiendo los colores de su equipo. Un momento muy emotivo.
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Messi, sobre su gol
“Tuve la suerte de que pasó, fue al arco y el arquero no llegó y fue gol. Fue una alegría enorme conseguir este primer triunfo. Es importante empezar a ganar, más allá de que sea otro campeonato, es importante para la confianza”, declaró Lionel después del encuentro. ¡Qué debut!